Riega con moderación
¿Sabías que más del 50% del uso residencial de agua se gasta al aire libre? Y se calcula que algunos propietarios riegan en exceso hasta en un 60%. Descubre cómo mantener un hermoso jardín mientras cuidas de nuestro recurso más preciado: el agua.
Tu impacto
Consejos y pasos de la acción
Introducción
¡Las plantas son buenas para el alma! Sin embargo, el agua es un recurso escaso y es importante hacer un uso cuidadoso de ella. Lo bueno es que, con un poco de planificación, puedes hacer las dos cosas. Hay una serie de medidas que puedes tomar para que tu jardín se vea siempre reluciente sin hacer un uso excesivo del agua. Tus plantas te lo agradecerán, ya que el exceso de riego puede dañarlas, y regarlas en la cantidad justa las mantendrá saludables.
1Planifica tu jardín
Si estás pensando en reordenar el jardín, un poco de planificación puede ayudar mucho a reducir las necesidades de agua.
Crea microclimas. Cada tipo de planta tiene necesidades de agua diferentes. Regar todo el jardín para satisfacer solo a las plantas más sedientas puede llevar a un exceso de riego del resto. Lo puedes evitar colocando las plantas con necesidades similares en "microclimas" para evitar un riego innecesario. Definir microclimas también crea un hábitat más autosuficiente para las plantas, ya que se beneficiarán de la sombra y la humedad de sus vecinas.
Ten en cuenta el sol, el viento y la sombra. Además, planificar la ubicación de las plantas según características de tu casa como el sol, la sombra, el viento y el suelo les dará un ambiente más saludable y mejores posibilidades de prosperar. Las plantas sanas necesitan mucha menos agua que las plantas estresadas.
Escoge especies autóctonas. Elegir plantas autóctonas o resistentes a la sequía puede reducir en gran medida el riego necesario del jardín.
2Ayuda al suelo a retener la humedad
Añade mantillo. Un día caluroso de verano puede eliminar hasta el 70% de la humedad del suelo por evaporación. Con una buena capa de mantillo, puedes evitarlo y conseguir que la mayor parte permanezca en el suelo. El mantillo puede estar hecho de astillas de madera, recortes de césped, hojas trituradas, abono orgánico u otros materiales. Una capa de 3-8 pulgadas, dependiendo de las necesidades de tu jardín, puede reducir sustancialmente las necesidades de riego y también impedir que la maleza bloquee la luz que necesitan las plantas para crecer.
Añade fertilizante. Si añades fertilizante al suelo, también aumentas su capacidad de retener agua y, por lo tanto, disminuyes las necesidades de riego. Agrega por lo menos una pulgada de fertilizante por año.
Elimina la maleza. Por último, controla la maleza o, si no, robará el agua destinada a tus plantas. Una buena cobertura del suelo, que sirva de complemento a tus plantas perennes, es otra forma estupenda de mantener la maleza a raya y el suelo húmedo.
3Riega con inteligencia
Riega lo justo. Es fácil querer "regar en exceso" las plantas para asegurarse de que tienen suficiente agua, pero en realidad es mejor darles solo la cantidad justa. El exceso de riego puede estresar las plantas. Muchas plantas no necesitan ser regadas todos los días. Prueba a reducir un poco el plan de riego y obsérvalas. Puede que les vaya bien, incluso que estén mejor, con algo menos de agua. Consulta las necesidades de agua recomendadas para tus plantas.
Riega eficientemente. Es fácil y tentador ir directo a la manguera, pero intenta usar una regadera cuando las plantas estén sedientas o establece un sistema de goteo que limite el uso innecesario de agua. Te harás una idea de lo que se necesita de verdad para mantener el jardín feliz.
Cuándo y dónde regar. Saber cuándo y dónde regar marca una gran diferencia. El sol evapora el agua rápidamente, así que riega por la mañana temprano o a última hora de la tarde para evitar la evaporación. También es muy importante poner el agua donde las plantas la necesitan. Procura regar lo más cerca posible de las raíces para evitar la evaporación innecesaria.
Las mangueras con goteros y los sistemas de goteo son excelentes para poner el agua donde tus plantas la necesitan. También mantienen secas las áreas entre las plantas, lo que ayuda a limitar el crecimiento de la maleza. Los aspersores son mucho menos eficientes. Obtén más información en la página de la acción Instala un sistema de riego eficiente. Si tienes plantas en maceta, ten en cuenta que el agua se evapora más rápidamente en los maceteros de terracota. Si tienes maceteros de terracota, considera la posibilidad de introducir una maceta más pequeña no permeable en el interior.
Empieza a regar. Pon en práctica los cambios anteriores que se apliquen a tu jardín, sigue estos consejos siempre que puedas y marca esta acción como realizada.
Crédito extra: Reutiliza el agua. Parte del agua que se consume en el interior del hogar, como la de la lavadora o la ducha, es apta para el jardín. Obtén más información en la página de acción Instala un sistema de aguas grises.